viernes, 24 de diciembre de 2010

miércoles, 1 de diciembre de 2010

EL.CI.DI. Soundsystem

Chale, me los voy a perder, pero pues ni modo, ya habrá otra ocasión. Por el momento, mis ingresos monetarios están destinados a otras cosas.

http://www.youtube.com/watch?v=IYO0h2QhkZA

Intento #229

He estado teniendo problemas para hacer la letra de una canción. Siento que todavía no siento lo que debería de sentir al cantarla. Necesita más significados, mejores palabras, vocablos no tan coloquiales, trillados si acaso así quieres llamarle. Necesito oraciones, versos más míos. Necesito engañar al sub-consciente. Necesito un alter-ego que escriba las palabras, los detonadores correctos que me harán sentir lo correcto en el escenario... Sé que tiene que haber más oro enterrado. Tiene que hacerme sentir más para que cada vez que la cante pueda transmitir lo que siento mientras la escribo.

Hacer canciones no es una tarea fácil. Con esto de que comienzo a emanciparme de la idea de ser un "percusionista" y adoptar el término de "músico", empecé a escribir más letras, a tocar más guitarra y me doy cuenta que realmente, no es tan fácil transmitir lo que buscas en las canciones, en especial a unas tan melancólicas cómo las que escribo.

Creo que resolví el acertijo, o bién, simplemente encontré una metáfora que me recomforta de esta aberrante frustración de no encontrar el sentimiento adecuado, que me recomforta de la impotencia que siento de no poder plasmar las sensaciones como quiero.

Al hacer canciones, hay que dar un poco de sí mismo. Poner un pedazo de nuestro ser para que al interpretarlas, volvamos a estar vivos, tan vivos cómo nacimos. Talvez es esta entrega que doy (o trato de dar) lo que me hace sentir tan... incompleto. Estas pequeñas partes de mi que me faltan cuándo estoy alejado del cuarto de ensayo o del escenario. Realmente, no estoy vivo, realmente me falta parte de mí.